Propiedad de estilo rústico está situada en el punto más alto de la histórica ciudad de Arona, en el sur de Tenerife.
El complejo de edificios, compuesto por la casa principal, 6 casas de invitados, una cocina exterior, un almacén de servicios, un granero y muchas zonas de recreo, está inmerso en el verdor de un jardín idílico.
Naranjos de 30 años, mangos, aguacates, manzanos y palmeras, plátanos y todo tipo de flores desprenden aromas mágicos y agradan a la vista. Para su riego, en la parte trasera del jardín hay un tanque de agua especial que se llena cada dos semanas.
La casa principal consta de un amplio salón con chimenea, un estudio, un dormitorio, un baño y una cocina totalmente equipada. Cada casa está equipada con una entrada independiente, baño privado y calefacción.
En el patio que conecta la casa principal y la de invitados, se encuentra un auténtico horno de pizza de piedra. El jardín tiene muchas terrazas y gazebos donde se puede disfrutar de impresionantes vistas de las montañas y el océano. En la entrada de la casa principal hay un estanque de peces de estilo japonés.
La finca está rodeada por un sólido muro de piedra y está protegida de forma fiable de las miradas indiscretas, lo que la convierte en un oasis de serenidad y privacidad. Hay una plaza de aparcamiento en el lugar.
Al mismo tiempo, las populares playas de Las Américas y Los Cristianos están a sólo 15 minutos de Arona en coche. Y todo lo que uno puede necesitar: tiendas, bares, restaurantes, oficina de correos y bancos está a poca distancia.
Esta finca es ideal para una vida feliz de una familia numerosa o como inversión en un hotel rural.